También conocido como cangrejo europeo, es un crustáceo de la familia de los cancridade, como los cangrejos. Su tamaño es considerable y puede llegar a medir 25 cm y pesar hasta 5 kg. De cuerpo aplastado, caparazón duro y robusto, presenta 10 patas cuyo primer par muestra fuertes pinzas con tonalidades negruzcas que encierra una carne blanca y deliciosa. Suele tener numerosos tonos pardos-rojizos con un vientre blancuzco. Habita en los fondos rocosos del Atlántico y el Mediterráneo.
Propiedades
Se trata de un crustáceo rico en proteínas, grasas, vitamina B y minerales como yodo, magnesio y sodio.
Temporada
El mejor momento para desgustar este marisco es entre los meses de noviembre y junio.
En el mercado
Podemos adquirirlo vivo, fresco cocido y congelado. En el caso de optar por el producto vivo, el ejemplar de cangrejo debe mostrar una tonalidad uniforme, sin manchas y con las patas intactas. Siempre es mejor optar por individuos hembra ya que contienen mayor cantidad de carne en su interior.
Conservación
El buey de mar fresco cocido debe mantenerse en la parte más fría del frigorífico durante un máximo de dos días. En el congelador mantiene sus propiedades durante un mes, aproximadamente. Como sucede con la mayoría de alimentos, el producto descongelado debe ser consumido y no volverse a congelar.
En la cocina
Podemos disfrutar con la carne fina y suave de este crustáceo elaborando una breve cocción (o al vapor). Para ello basta introducirlo vivo en agua salada fría e ir subiendo la temperatura de forma progresiva hasta su cocción. Normalmente, se calculan unos 15 minutos de cocción por cada kilo del ejemplar, añadiendo 5 minutos de cocción por cada medio kilo. Después debe introducirse de nuevo en agua fría (con hielo) para conseguir que su carne no se endurezca y mantenga su textura característica. En la mesa se presenta en el interior de su propio caparazón previamente vaciado, sin olvidar las patas que encierran una deliciosa carne. El buey de mar también es un excelente ingrediente en ensaladas de la huerta o de platos de inspiración marinera como paellas o arroces caldosos acompañados de un buen vino blanco fresco.