A pesar de su inquietante nombre y su aspecto poco apetecible, la trompeta de la muerte (Craterellus cornucopioides) es una de las setas más apreciadas en cocina.
Características
Conocida también como trompeta negra o cuerno de la abundancia, muestra un sombrero de 2 a 8 cm, al principio de forma tubular y después más abierto, de color negro y ocasionalmente con tonos azulados o violáceos. Su carne es gris-negruzca, de textura elástica y aroma característico y profundo, parecido al del melocotón.
Temporada
Crece en pequeños grupos formando ramilletes desde finales de verano hasta bien entrado el otoño en bosques de suelo húmedo asociándose a árboles como la haya y el roble.
En la cocina
Al igual que el rebozuelo, la trompeta de la muerte es una seta muy versátil y se adapta perfectamente a todo tipo de preparaciones culinarias. Tanto fresca, como en conserva o seca es un delicioso ingrediente en todo tipo de guisos. Se puede preparar en todo tipo de guisados y estofados, salteados, revueltos con huevo, en tortillas, en platos de pasta, en arroces o en recetas de carne o pescado.
Cómo se conserva
Se puede conservar en excelentes condiciones durante tres días en el frigorífico. Previamente salteada puede congelarse y también desecarse o conservar en aceite o vinagre.
¿Lo sabías?
La trompeta de la muerte es una de las setas más fáciles de distinguir por su característico aspecto. Solo guarda cierto parecido con la especie Craterellus cinereus, también comestible de carne ligeramente dulce y aroma a ciruela.