La zarzamora, de color azul oscuro, es el fruto de la rubus fructicosus, planta que crece de forma silvestre en diferentes tipos de bosque. Existen alrededor de 375 variedades diferentes. Aunque aun hoy día la podemos encontrar en su forma silvestre, su cultivo está muy extendido y produce un fruto más dulce y meloso. La zarzamora contiene antioxidantes beneficiosos para nuestro metabolismo. Supone también un buen aporte de fibra, vitamina C, ácido fólico y vitamina B.
Temporada
En regiones templas del hemisferio norte, la zarzamora silvestre se encuentra en su mejor momento a finales de verano e inicios de otoño, desde finales de agosto hasta finales de octubre. En las zonas más cálidas del sur de Europa las encontramos desde mediados de agosto. Es también en estas zonas cálidas donde la zarzamora se cultiva y la podemos encontrar durante todo el año.
Cómo comprar Zarzamoras
A la hora de comprarlas deberemos fijarnos en que sean frutos voluminosos y de color brillante y oscuro, evitando aquellos que parezcan verdes y reblandecidas, signo de que llevan demasiado tiempo recolectadas o que han recibido golpes. Si se puede siempre será mejor recolectarlas nosotros mismos. Al ser un producto delicado, los recolectaremos y los guardaremos en un recipiente que permita la circulación de aire, como una cesta de mimbre, y evitaremos la humedad que podrí producir la proliferación de hongos.
Almacenaje
En el mejor de los casos, las vamos a comer o cocinar durante las horas siguientes a su adquisición, con lo cual las guardaremos en un lugar fresco. Si tenemos que guardarlos durante un tiempo, lo mejor será el frigorífico: pondremos los frutos en un recipiente bajo y ancho, evitando superponerlos y así evitar que se chafen, y los cubriremos con un paño húmedo, evitando que se resequen. Antes de comerlas las vamos a tener un rato a temperatura ambiente para que recuperen sus aromas. También las podemos congelar, aunque su textura perderá su tersura y nos obligará a aplicarlas en recetas y usos donde esta no sea tan importante.
Cómo comer zarzamoras
Para limpiarlas, aclararlas con agua y retirar los tallos y partes herbáceas. Se pueden consumir al natural o cocinarlas en postres, mermeladas, gelatinas y jaleas, helados, bebidas, tartas… Y también para rellenar carnes o elaborar salsas para aves y carnes grasas.
Otros
La zarzamora es rica en minerales como el magnesio, el calcio, el potasio y el fósforo, así como en vitaminas C y E y en provitamina A. En infusiones, alivia molestias de tipo gastrointestinal así como resfriados. Su contenido en antioxidantes hace de su consumo una buena prevención contra el cáncer.
