Pertenece a la familia de las crucíferas, es una variedad de la col que solo produce hojas y a la que se denomina también col brotonera, y consta de dos partes, el brotons y las espigalls que corresponden a diferentes fases del crecimiento.
Recuperada y cultivada en la zona del Garraf, Sitges o Vilanova y la Geltrú, es la variedad de col más antigua ya que, incluso antes de los romanos, era el único tipo de col que se consumía y tenía estas características.
Sus hojas son de color verde oscuro, alargadas y con flecos al final.
De sabor más suave que una col, sus tallos recuerdan un poco a los espárragos verdes.
La época de recolección por excelencia es a finales de otoño que es cuando genera unos brotes con mucha hoja (brotons), y se extiende hasta finales del invierno.
En la cocina
Es una verdura para tomar cruda, en salteados, al vapor, es muy versátil y apta para todo tipo de acompañamientos. Se pueden escaldar ligeramente sus hojas para una ensalada crujiente o tomarla cruda cortada muy fina. Los tallos troceados se pueden añadir por separado a diferentes platos. Desde hace un tiempo se ha convertido en un importante reclamo gastronómico.
Propiedades
Las espigalls poseen las propiedades nutricionales de las coles y más especialmente de las coles rizadas o crestas. Son muy ricas en Vitamina C, vitamina A y minerales como el calcio, potasio y magnesio entre otros. Su intenso color verde denota la presencia de clorofila, que actúa como oxigenante y desintoxicante del organismo.
Antiinflamatorias, mejoran la salud del estómago, el funcionamiento hepático y pulmonar gracias a la presencia de compuestos azufrados
¿Sabías qué?
La segunda quincena de noviembre, los restaurantes de la zona donde se cultivan promocionan diferentes platos con esta verdura.